Cursos

Podcast

Canales Youtube

Visitantes

37,725,228

La batalla por Tenochtitlan

Hits:886

La batalla por Tenochtitlan

Pablo Martinez*
Periódico La Jornada.
1 diciembre 2023
El muy recomendable libro de Pedro Salmerón La batalla por Tenochtitlan no sólo es un libro cargado en datos y precisiones, sino que el autor creó un narrador que va reconstruyendo los escenarios para poder situar imaginariamente los hechos; estos hechos históricos que son construidos y reconstruidos con base en la suma de más datos y fuentes que fueron haciendo este hecho más preciso para analizar.

Leí a Pedro Salmerón en 2015 en La Jornada en su artículo La guerra por la historia, donde narra cómo se utilizan las herramientas elementales del quehacer histórico para construir verdades opacas e incompletas, como lo suelen hacer muchos historiadores a modo, casos como la construcción del libro de historia para quinto grado de primaria de 1992 por Héctor Aguilar Camín.

La batalla por Tenochtitlan
Casos como los Juan Miguel Zunzunegui, quien abiertamente afirma que no hubo exterminio indígena en la Conquista, negando la diversidad étnica y pluricultural, trayendo la vieja teoría de las jaulas de la melancolía y viviendo como lo diría Salmerón en un imaginario protectorado francés o son súbditos de un emperador.

Es por ello que el libro me es muy recomendable, se vuelve creíble la narrativa entre dos visiones, como sucede en el diálogo que pude observar con los diarios de Hernán Cortés, y el contraste con las narrativas de otros personajes sobre el mismo suceso, pasando lo mismo con los datos acerca de soldados, armas, estados de salud, etcétera. Se puede observar desde otra escena a partir de las narraciones de otros personajes, no negando su existencia e imponiendo una verdad.

Creo que ha sido una gran batalla por parte de Pedro Salmerón y sus textos acerca de los falsificadores de la historia la lucha por generar una desmitificación a personajes y sucesos, como lo observa en los textos de Zunzunegui que muchas veces sólo observaron el lado de la Inquisición. Para Juan Miguel Zunzunegui, no hay nada en Hidalgo fuera de eso (Padre de la patria), como lo muestra desde el título capitular Hidalgo: ¿guerreros insurgentes o turba saqueadora?, mostrando sólo la perspectiva histórico-religiosa.

Pero poco el ha importado a Juan Miguel al publicar su último libro Falsificar la historia, haciendo un recorrido de medios por youtubers y podcasts con públicos amplísimos donde narra como él ha descubierto la verdad y sabe el problema de lo mexicano, el porqué seguimos así, haciendo hincapié una y otra vez en que nos seguimos creyendo el tema de que fuimos conquistados.

Creo en la importancia que tiene la reconstrucción del hecho histórico para analizar diferentes versiones sin hacer juicios sumarios. Basta comprender la importancia de Emiliano Zapata para el movimiento zapatista y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional frente a las versiones de muchos católicos hablando de una robolución.

Es por eso que me permito hacer la recomendación del libro, pienso que el texto no tiene la finalidad de encontrar al aliado o al enemigo, sino más bien reconstruir un escenario que nos permita observar lo que nos cuentan que sucedió, poniendo en el camino otras narrativas que enriquecen el modo de pensar La batalla por Tenochtitlan.

* Maestro
____________________
Nota de Educayotl AC:
La visión eurocéntrica colonial de la historia, creada por la ideología criolla en estos 199 años del llamado México-Imaginario, en esencia no ha cambiado. Han creado una narrativa de heroicidad, valentía y de gran empresa, de una supuesta conquista de ejércitos y soldados españoles, con esforzados capitanes. La historia en manos de los vencedores es pobre, llena de incongruencias y sobre todo mentiras, para que el pueblo de mexicas-mexicanos del México-Imaginario, siga huérfano de identidad, inseguro y vulnerable, fácilmente sometible y explotable. Una narrativa torpe y pobre, manoseada por todos los desfiguradores de su propia historia.
Aquí en el Anahuac, desde 1519, solo se conoce la historia de los vencedores y la visión de los vencidos escrita por los vencedores. Aquí los agredidos, los invadidos y ocupados, no tienen lugar. Aquí solo existe el discurso machista de la patria hispánica, no se conoce, se oculta y se boicotea la visión crítica y analítica. Aquí no hay espacio para la visión femenina de la Matria. Ha sido evidenciada las mentiras, omisiones y tergiversaciones de Hernán Cortés en sus Cartas de Relación, que fueron estudiadas rigurosamente por la Maestra Eulalia Guzmán Barrón y que el gobierno mexicano, no las ha querido publicar, porque las mentiras de Cortés son los cimientos del discurso criollo, no solo de lo que ellos llaman conquista de México, sino de la visión histórica del México-Imaginario de la ideología criolla.
Toda la historia de 9500 años de una de las seis civilizaciones más antiguas del mundo, no existen para el Estado mexicano y sus gobiernos títeres de las oligarquías criollas. Todo el pasado, como ellos llaman -prehispánico- se reduce a los mexicas y a un inexistente imperio azteca. La caída de Tenochtitlan en manos de Ixtlilxóchitl y no de Cortés, es para esta ideología, la caída, destrucción y extinción de la civilización del Anahuac, que para ellos ya no existe. Sin embargo, ahí están los resilientes pueblos mayas que sostuvieron la lucha armada en contra de la invasión hasta 1697 y nadie toma en cuenta la permanente guerra de resistencia de todos los pueblos anahuacas hasta llegar con los insurgentes mayas del EZLN y la violenta lucha en contra del llamado -crimen organizado-, que es el brazo armado de las oligarquías y las mega empresas extractivas.
Los mexicas-mexicanos del México-Imaginario, no saben que no saben nada de la otra cara de la historia. La historia de la Matria, de la Madre Cultura, la historia propia-nuestra. La historia del Anahuac sigue agazapada esperando el momento luminoso de su revelación exaltante, que liberará de la amnesia y la orfandad a los hijos de los hijos del Anahuac. Educayotl AC. Educar para el futuro con la sabiduría del pasado. No podremos salir del calabozo de la colonización con las ideas de los carceleros. Descolonizar es dignificar.

Buscar