El concepto de La Batalla Florida es muy revelador de la concepcin filosfica del Anhuac. Primeramente debemos de observar que la guerra para los antiguos mexicanos, probablemente desde las primeras sociedades que hoy llamamos olmecas, fue de carcter simblico.
Como hemos apuntado ya, no existe un avance proporcional entre las matemticas, la medicina y la arquitectura, por citar slo tres aspectos de la cultura, con la evolucin de las armas. En efecto, las armas que encontramos en la iconografa del perodo Preclsico, sern las mismas que veremos en el perodo Postclsico con los mexicas. La pregunta es obvia; por qu existieron avances en otras reas del conocimiento y en la tecnologa militar se mantuvo casi igual, a excepcin del atlatl, que fue inventado para cazar aves al vuelo por los toltecas.
?Es entonces probable que el trofeo que persegua el guerrero de la ?batalla florida? no era otro que su propia alma?. (Laurtte Sjurn. 1957)
Lo anterior no es ?incapacidad o inferioridad? cultural o tecnolgica. Por el contrario, nos revela que los Viejos Abuelos no enfocaron su desarrollo en las armas y en la guerra. sta siempre fue, ms de carcter simblico-religioso, que una ?industria? de expansin, explotacin y aniquilamiento, como la han usado hasta nuestros das la cultura occidental. La guerra desde la primera presencia de Quetzalcatl en las tallas olmecas, se refiere al smbolo espiritual de la guerra interior, que los toltecas llamaron, en el perodo Clsico, ?La Batalla Florida?.
?Hemos visto ya en varias oportunidades que la existencia humana debe tender a la trascendencia del mundo de las formas que esconde la realidad ltima. Esta realidad reside en el corazn, y es necesario obligar a ste a liberarlo cueste lo que cueste: he aqu la meta suprema de la ?guerra florida?. Alcanzar, a apoderarse de su corazn significa entonces penetrar en la vida espiritual.? (Laurette Sjurn. 1957)
A pesar de que en el perodo de expansin mexica, la guerra fue usada como nunca se haba visto en el Cen Anhuac, la belicosidad de los mexicas, no tuvo el carcter de ?guerra de exterminio?, como los europeos la aplicaron en su conquista en Amrica. La guerra en el ltimo perodo del Postclsico fue un ejercicio de poder entre los Seoros, eminentemente ritual y con un alto sentido religioso.
?Los cholultecas, que nunca se haban visto con los mexicanos en campo (nunca se haba enfrentado militarmente), quisieron probar su ventura y valor. Los cuales enviaron sus mensajeros a Cuauhquecholan y a Atzitziuacan ?que eran las fronteras- a decirles que de su parte avisasen a Moctecuhzoma cmo ellos queran holgarse y regocijarse con ellos en aquel campo y regocijar al dios de la tierra y dar contento al seor de las batallas y al sol; que le suplicaban enviasen a sus gentes, que ellos estaran en el campo esperndolos a tercero da.?... ?Pero, sintiendo su dao (los cholultecas), despacharon luego un mensajero a Moctecuhzoma, dndole cuenta de lo que aquel da haban hecho y de la mucha prdida de su gente. Y esperando otro da, para ver si los cholultecas pedan ms batalla, o quisiesen vengar a sus gentes, aparejados los mexicanos para vengar la prdida suya, los cholultecas enviaron sus mensajeros al general del ejrcito mexicano, dicindole que ya se haban holgado y regocijado y pasado tiempo un poco con ellos; que bastaba, que se fuesen con Dios.? (Fray Diego Durn.)
Los mexicas hacan una guerra sagrada y luchaban, segn ellos, para mantener vivo al Quinto Sol que estaba amenazado en su existencia, segn las reformas religiosas e ideolgicas que realiz Tlacalel y, adems, extendan su dominio e incrementaban el nmero de pueblos tributarios. Los guerreros que moran en estas batallas encontraban la ms alta aspiracin social.
?Que no tuviesen pena en ello, y que la muerte de su hermano (Moctezuma) le pesaba, por perder hombres tan valientes, pero que morir en honra y defensa de la patria iban matizados y esmaltados con el matiz y esmalte de su alta sangre y valor, adornados de piedras preciosas y de precisos plumajes de su grandeza y hechos valerosos y que aquel era el fin que l y todos haban de desear, pues no murieron como mujeres tras los tizones y fones, sino con la espada en la mano, matizando con el rosicler de su sangre y de la ajena las yerbas del campo y los rayos del sol que por ellos se extienden, y que de esto se gloriaba y estaba muy ufano. Y as mando luego se hiciesen las exequias de todos los seores que en aquella batalla haban muerto...? (Fray Diego Durn.)
Las guerras de los mexicas se hacan para conseguir prisioneros y llevarlos a Tenochtitln y sacrificarlos. Los prisioneros eran tratados con mucho respeto, pues eran para ellos, ?alimento del guila?. Se consideraba una torpeza que un guerrero matara en el campo de batalla a su adversario, pues el objetivo era tomarlo cautivo. Los mismos prisioneros de un bando y otro se sentan honrados por su destino final.
Lejos de ser una guerra de exterminio y rapia, como las europeas, las guerras floridas de los mexicas, aunque haban sufrido un cambio grotesco, pues cambiaron el sacrificio espiritual por el material. La Batalla Florida dej de ser una lucha interior, para pasar a ser una lucha por tomar prisioneros para la piedra de los sacrificios, mantena un sentido de grandeza espiritual, aunque trastocada.
Los guerreros que iban a las Guerras Floridas llevaban sobre sus hombros la inmensa responsabilidad social y religiosa de ?mantener con vida al Quinto Sol?. No exista ninguna actividad en la cultura mexica que tuviera ms alto honor, pues se ?serva?, no slo al pueblo, sino fundamentalmente al universo.
?La causa porque se movan as tantos a la guerra, aunque la principal era su propio inters y ganancia de honra y bienes; lo segundo era no tener su vida en nada y tener por bienaventurados a los que en la guerra moran y as llamaban a la guerra xochiyaoyotl, que quiere decir ?guerra florida?, y por el consiguiente, llamaban a la muerte del que mora en guerra xuchimiquiztli, que quiere decir ?muerte rosada, dichosa y bienaventurada?. (Fray Diego Durn.)
Precisamente fue el cambio de los simbolismos toltecas de carcter espiritual, que Tlacalel implant, lo que les dio a los mexicas una doctrina materialista-mstica-guerrera. La Batalla Florida de carcter interior y espiritual de los toltecas, fue cambiada por una Batalla Florida en contra de los vecinos y hecha con armas ?relativamente inofensivas?. Estas guerras del perodo Postclsico se intensificaron en los ltimos doscientos aos antes de la llegada de los espaoles, durante la formacin de la Triple Alianza y la consolidacin del Imperio Azteca. Estas guerras generalmente fueron ms de carcter simblico y ritual; aunque los mexicas llegaron a ?castigar? excepcionalmente a algn pueblo, comnmente no se destruan las ciudades y no se aniquilaba a la poblacin civil.
?Las flechas, atributo principal de este guerrero celeste, no pueden evidentemente simbolizar ms que los relmpagos interiores que descubren la existencia de una condicin divina?... ?De la inmersin en esta conciencia superior que disuelve la suya, Quetzalcatl sale armado de las flechas que le permiten, convertirse en Seor de la Aurora, ?disparar sus rayos? que revelan a los humanos la salvacin que cada cual debe intentar por s mismo.? (Laurette Sjurn. 1957)
La Batalla Florida de los toltecas implicaba la lucha ms difcil que un ser humano puede enfrentar. Hombres y mujeres se preparaban para esta ?guerra interior? y por tal, se convertan en ?guerreros?. La disciplina, la frugalidad y la austeridad en que formaban a estos guerreros eran rigurosas y muy estrictas. Las armas eran ?flor y canto? y el campo de batalla era su propio corazn. Vencer la inercia que destruye la materia. Los vicios, la pereza, la ignorancia personal. Estos guerreros de la muerte florecida, eran impecables cazadores de conocimiento y forjadores de su templanza espiritual.
?!Esmeraldas son: turquesas tu greda y tus plumas, oh dador de la vida! Dicha y riqueza de los prncipes. Es la muerte al filo de la obsidiana, La muerte en la guerra.? (Romances de los Seores de la Nueva Espaa.)
Los toltecas desarrollaron una escuela hermtica de conocimientos filosficos, igual que las otras antiguas civilizaciones con origen autnomo. Los conceptos de: el guerrero, la batalla florida, flor y canto, el rostro propio y el corazn verdadero. Nos hablan en su conjunto de una visin filosfica de las posibilidades espirituales que tena la existencia humana y la capacidad para trascender los limitados espacios de la existencia material. La Batalla Florida es una de las expresiones ms vigorosas de la concepcin filosfica que tienen los toltecas del mundo y de la vida.
(Tomado del libro RAICES Y ESENCIA DEL MEXICO ANTIGUO. Guillermo Marn 2004)