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QUINES SOMOS? / AJKIA TOJUANTIJ?

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QUINES SOMOS? / AJKIA TOJUANTIJ?

Ojarasca/ 324
Peridico La Jornada
JUAN HERNNDEZ RAMREZ
Emanuel Siaruqui, pescador, Moroncarit, Sonora. Foto: Jernimo Palomares

Tlen nepa nekaulistli kali
uajkapanemilistli mopajki.
Ipan tlitl payankaxochitl itlajkuilol
ika mestli moijkuikojkej
tlen nepa uajkapayotl youali.
Nopanoj mochijkej sintlakamej
iuan ipan intlajlo atlajtli kiuikaj
teteyomej inesso
tlen tonalmej uajkapaeua tlitl
iuan kuajmej anejmemilis patlantli.
Tlen ipan ojtli timochijkej timaseualmej
inik kuatitlantik temiktli ipan nejnentli
ipan tlan taluiltlanestili momachichijtok youali
ika payantok tetl tetsakualmej.
Tech pepesojtok ojtli
tokuitlapan kuetlaxtli
iuan tech tokajpatlatiyajki tlalpotektli
tlen moilkajtok tepisilmej motemititiyajtok.
Teixko, nejnentli pepestik
iuan tlalixko
yolojtli xochimej
momoyajtok.
Titlakamej tojuantij,
siuatl.
Tlen nauakuikaj maseualmej,
tlen ika otomitl tlajtoli tlalsanilouaj,
tlen ika tepehua tlajtoli tlaauetstemikij.
tlen ika totonako tlajtoli tlatlikuiltiaj.
In tlakatl
In siuatl.
Kuetlaxtli intlapalis
ipan sintli mokuitok.
Chichilsintli
kostik sintli.
Tonana
Tlali
Toikniuaj,
Tonatij
Mestli
Ueyatl.

QUINES SOMOS? / AJKIA TOJUANTIJ?


Desde la casa del silencio
se dibuj la historia.
Sus letras en rosas de fuego
se escribieron con lunas
desde la noche inmemorial.
Los hombres de maz ah se hicieron
y llevan en el arroyo de sus venas
la sangre de los dioses de piedra,
el fuego primigenio de los soles
y el vuelo nutico de las guilas.
Somos gente que se form en el camino
en su paso por sueos montaosos
en la noche esculpida por auroras
con pirmides de piedra desgastada.
El camino nos ha desnudado
la piel de la espalda
y el polvo nos cambi cada vez el nombre
llenndose de guijarros y olvidos.
Sobre las piedras, los desnudos pasos
y sobre la tierra
las flores del corazn
desparramadas.
Nosotros somos el hombre,
la mujer.
Gente que canta con el viento en nhuatl
los que platican con el viento en otom
los que suean con la lluvia en tepehua,
los que encienden el fuego en totonako.
El hombre
la mujer.
El color de su piel
fue extrada del maz.
Maz rojo,
maz amarillo.
Nuestra madre
la tierra.
Nuestros hermanos
El sol
La luna
El mar.



Yo soy poeta porque me gustan las cosas bellas de la naturaleza y la humanidad, porque a aquel que ama la belleza, lo reconozco como poeta. Y soy poeta porque me gustan las cosas hermosamente hechas, aunque yo soy imperfecto. Mi nombre de pila, Juan Hernndez Ramrez, y mi cuerpo nacen en el pueblo de Colatln, Ixhuatln de Madero, Veracruz. Soy un hombre que viene del sufrimiento que da el hambre y la miseria y por aras del destino o quiz por voluntad propia he escapado del anonimato y de la desesperanza, reconocindome a m mismo como un individuo del pueblo originario nhuatl. Pero yo nunca me he credo ser un poeta; he escrito algunos versos en mi lengua originaria nhuatl y castellano, y quiz sean buenos, quiz sean malos. Si eso me hace poeta, entonces soy un poeta, pero un poeta de la marginacin, porque los pueblos originarios siguen estando en esta situacin de marginalidad. Adems, porque toda escritura literaria de cualquier pueblo originario, los detractores la llaman literatura indgena, para seguir poniendo a los indgenas letras escarlatas y seguir estigmatizndonos, sabiendo que no hay una potica universal, la poesa es universal. Slo hay buenos y malos poetas, pero eso de bueno y malo es responsabilidad del poeta, debe buscar y encontrar la esencia de la buena escritura, buscando el privilegio de una voz propia, entonando con su canto todas las voces.

Antes de escribir algunas lneas literarias, fui maestro de Educacin Indgena por 41 aos: despus de ser castellanizador por tres aos, comprend que estaba matando mi cultura, y en la dcada de los 80 emprend un proyecto cosmognico de las culturas originarias de la huasteca veracruzana, donde viven nuestros hermanos tnek de Tantoyuca, Tepehua de Tlachichilco e Ixhuatln de Madero, hah, tutunak y nhuatl, porque era yo jefe de sector de Educacin Indgena y a mi cargo tena 13 zonas escolares y fue mi idea iniciar una educacin integral desde el entorno del educando. La idea principal fue aprovechar las lenguas originarias, porque cada lengua es depositaria de todo el universo de cada cultura, la que fuese. Con esa idea capacitamos a los docentes para extraer de las lenguas todos los conocimientos: inicibamos con los nios a escribir mitos, leyendas, cuentos, cantos, refranes; rescatamos instrumentos que se estaban olvidando y con ello la msica ritual de los pueblos, que conllev a la revaloracin de una inmensa riqueza de danza que hoy es una carta de presentacin de estos pueblos para las actividades artsticas y tambin polticas. Se revalor la alimentacin con productos orgnicos de tierra local, que ahora est llena de agroqumicos. En todas las escuelas se practic el deporte, la danza, el canto bilinge, floreci la indumentaria en cada uno de los rituales que se practicaron; pero no dur el gusto. Un sector del magisterio sindicalista empez a argumentar que estbamos regresando a la poca de las pirmides, las flechas y los taparrabos y el 1 de mayo de 1990 fui encerrado en mi oficina con mi esposa por 56 das sin que pudiramos alimentarnos bien. Me acusaron de todo lo que quisieron y hasta me fabricaron abusos contra las mujeres, pero afortunadamente he sido congruente con mis principios. Con ese acto, se desbarat todo mi proyecto, ahora Educacin Indgena es slo un proyecto educativo de lujo abandonado. Esta actitud de incomprensin, intolerancia, desconocimiento y la prdida de una mujer que am ms all de todas las cosas me llen de tristeza y por ello me traslad a la ciudad de Xalapa; ah me tuvieron sentado en una silla sin hacer nada. Lo que s entiendo es que soy un espritu rebelde y que he ido aprendiendo de la vida. Decid en ese momento empezar a escribir, no para ser famoso, sino para dejar a un lado el dolor y de ah surgi Eternidad de las hojas, escrito en espaol.



Tal vez si muriera
Al marchitarse las flores amarillas
una lgrima de hojas verdes
borrarn la luminosa muerte.
Una gota de profundo silencio
en sus ojos
elevarn el canto silvestre
del fuego consumido.
De la embriaguez terrena
slo quedar la noche
con su corola de fuego.
Espero que la ausencia mortal
consiga espigas en el carro del sol.
Canto detenido
con sus ramas al viento.


Quiero comentar que yo no tuve la fortuna de poseer un solo libro en casa, no haba un ambiente lector en mi hogar, haba un ambiente de trabajo: machetes, hungaros y hambre. Grandes escritores han tenido grandes bibliotecas, como mi paisano Sergio Pitol, o han ido a estudiar al extranjero, como nuestro argentino Jorge Luis Borges; nosotros los originarios de Mxico tenemos que hacernos a la fuerza de la observacin de nuestra naturaleza y desde luego aprovechar todas las lecturas que vengan a nuestros ojos y a nuestras manos. En mi niez, yo no tena nada que leer, hasta que en la escuela me cay el libro Sobre las nubes de Amrica de Valentn Zamora Orozco y de ah tambin quise conocer el mundo. Empec leyendo poesa de Jos Santos Chocano, Rubn Daro, stos son un poco de los antecedentes, y ya, aqu en la soledad de la ciudad, quise demostrarme que yo no estaba equivocado en la propuesta educativa que inici en Chicontepec y quise registrar la lengua de mis padres, y cmo hacerlo? Pues dije, escribiendo poesa, y as inici: yo no quiero que mi lengua originaria se pierda porque ella es una prueba material que nosotros estuvimos, estamos y estaremos an en esta nuestra tierra.

Para m, nunca ha sido fcil escribir, inici mi escritura leyendo al padre Garibay y Len Portilla, y as fui a dar con mi abuelo, el poeta de Texcoco, Nezahualcyotl, y de l me colgu un poco, le tambin a Rilke, Arthur Rimbaud, Eliot, Edgar Allan Poe y otros ms, pero creo que ya no aprend nada. Pero muchos de ustedes que tienen la suerte de vivir en la ciudad o son jvenes que viven este tiempo tienen toda la tecnologa en sus manos adems de todas las libreras, y si les gusta escribir, pues escriban. Tenemos un ejemplo inigualable, un excelso narrador, Juan Rulfo, para los que quieren tomar su ejemplo y quieren escribir narrativa, hay que leerlo, leer a Kafka, a Nathaniel Hawthorne, Garca Mrquez, etctera. Y si queremos escribir poesa, hay que leer a Rosario Castellanos, Jos Emilio Pacheco, Sylvia Plath.

Cierto, han surgido muchos escritores de lenguas mexicanas, pero se imaginan que al ser un personaje de pueblo originario, ya se tiene el triunfo como escritor en las manos, y no: nuestra escritura debe tener sentimiento, arraigo, imagen, el sonoro ritmo de las montaas, llanuras y azules mares de nuestra tierra, hasta alcanzar nuestras letras la universalidad, con un rostro y una voz personal.

Me despido agradeciendo esta distincin que creo todava no merecer, el que mi nombre sea pronunciado dentro de las paredes de este recinto sagrado de todas las bellas artes. Agradezco a Rosario Patricio, presidenta de la Asociacin de Escritores en Lenguas Indgenas, que con su oficio de gestora ha hecho posible este acto en el que el espritu de los pueblos originarios se hace presente.

Agradezco la presencia de mis dioses en este acto, por el apoyo que recibo de mi familia: Paula, mi compaera de la vida, mis hijos Citlalxochitl, Tlacaelel, Ometeotl, su esposa y sus hijas Xokoyotsin, Yhodansy, aqu presentes, y tambin a mis amigos que son mi familia, Adal, Lalo, muchas gracias. Agradezco la presencia de todos ustedes y con mucho cario felicito a Elvira de Imelda por su homenaje. Muchas gracias.

__________

Juan Hernndez Ramrez, uno de los poetas mayores en lengua nhuatl, naci en 1951 en Coatln, Ixhuatn de Madero, Veracruz. Promotor de las culturas y lenguas originarias de la Huasteca, nhuatl, otom, tepehua y totonaka. Ha publicado varios libros de poesa. Totomej intlajot / Ombligo de la tierra, el ms reciente, se encuentra en prensa en la Universidad Veracruzana.

Este discurso fue ledo durante el homenaje a Juan Hernndez y Elvira de Imelda Gmez, escritores en lenguas nhuatl/ espaol y zoque/espaol, respectivamente, el martes 19 de marzo de 2024 en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, en la Ciudad de Mxico.

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